El presidente municipal de Cuernavaca, José Luis Urióstegui aclaró que los usos y costumbres no están por encima de la ley
Autoridades municipales puntualizaron que las autoridades auxiliares y comisariados de bienes comunales y ejidales no tienen facultades para expedir licencias de construcción ni de funcionamiento
Tras los hechos violentos registrados el pasado miércoles 11 de mayo por integrantes de la ronda de Ocotepec contra policías municipales por la suspensión de una construcción que no cuenta con los documentos oficiales, el presidente municipal de Cuernavaca, José Luis Urióstegui Salgado, aclaró que si bien en todo momento el ayuntamiento ha sido respetuoso de las autoridades elegidas por la comunidad como son los ayudantes municipales, los usos y costumbres no están por encima de la ley.
En conferencia de prensa acompañado por el secretario del Ayuntamiento, Carlos de la Rosa Segura y la titular de la Secretaría de Protección y Auxilio Ciudadano (SEPRAC), Alicia Vázquez Luna, afirmó que la acción realizada el miércoles por parte del municipio fue un acto de autoridad con todos los fundamentos legales y lo que se tuvo en respuesta por parte del Ayudante de Ocotepec e integrantes de la ronda fue una transgresión a la ley.
Precisó que la Ley Agraria no concede a los comisariados de bienes comunales o ejidales facultades para el desarrollo urbano, por lo cual la regulación de los asentamientos que se encuentran al interior del poblado le corresponden al municipio de acuerdo al artículo 115 de la referida norma, que tiene la facultad de poner orden en todo lo que sucede desde el punto de vista de desarrollo urbano, uso de suelo, prestación de servicios públicos, e incluso, de vigilancia.
Explicó que las atribuciones de las autoridades auxiliares, como son los ayudantes municipales, están debidamente planteadas en el artículo 18 del reglamento tanto para la elección de las autoridades auxiliares municipales como la Ley Orgánica Municipal, señalando que no tienen facultades para expedir licencias de construcción y de funcionamiento, siendo funcionarios que representan a la comunidad ante la autoridad y son el vínculo de la autoridad para la población.
En este sentido, el alcalde puntualizó que las construcciones que se hagan bajo esos permisos apócrifos carecen del reconocimiento oficial por parte del Ayuntamiento de Cuernavaca, pretendiendo en este caso la autoridad de Ocotepec segregar un territorio del municipio y tratar de ordenarlo como les parezca conveniente, lo que no es correcto.
A pesar de esta situación, José Luis Urióstegui dejó en claro que lo antes mencionado no significa un rompimiento con el poblado de Ocotepec, al contrario, es un llamado al respeto a la ley y quede claro las funciones de autoridades auxiliares tanto de Ocotepec como de los otros pueblos de Cuernavaca, quienes están llamados a ser partícipes en la toma de decisiones, pero dentro del margen legal.
“Hoy enfrentamos una circunstancia que va a obligarnos tanto a las autoridades de Ocotepec como del Ayuntamiento a establecer una mesa de diálogo para comprender mutuamente que sucede al interior de los bienes comunales y que sucede con la autoridad municipal para que las decisiones que tomemos favorezcan a toda la población del municipio de Cuernavaca y particularmente por los que no viven ahí, pero se ven obligados a transitar diariamente por el poblado de Ocotepec”, destacó.
Explicó que la retención del elemento de policía vial y la necesidad de hacer una sustitución por la persona que fue encontrada en la comisión de un delito flagrante de portación de arma obedece también a la toma de decisiones que impiden daños de mayores consecuencias y a pesar de que están ciertos que esto no debería suceder, la integridad del elemento policiaco reclamaba la atención y la toma de decisiones inmediatas.
Finalmente, informó que el Gobierno Municipal ha presentado ya dos denuncias contra quien resulte responsable y será el Ministerio Público quien les dé seguimiento y finque responsabilidades contra quien corresponda.